Rubén Cortés
La izquierda recibió ayer una noticia feliz: el IFE, el mismo IFE al que AMLO considera “poco confiable”, validó la asignación de legisladores plurinominales, por lo que tendrá 73 por esa vía: nueve en el Senado y 64 en la Cámara de Diputados.
Mucho, muchísimo dinero del presupuesto para la izquierda, pues. Fue sólo por eso, por dinero, que montó un intenso tráfico de legisladores para armar cuatro bancadas en el Congreso, y busca una más.
El PT consiguió a su quinto legislador para conformar un grupo parlamentario en el Senado: Marco Antonio Blásquez, quien fue electo por el Movimiento Ciudadano, pero ahora es del PT, junto con Manuel Bartlett, Ana Gabriela Guevara, Martha Palafox y David Monreal.
Ahora, tiene dos bancadas en el Senado (PRD y PT) y dos en la Cámara de Diputados (PRD y Movimiento Ciudadano), no precisamente para tener más votos, ya que se supone que como todos sus integrantes son de izquierda, votarán igual.
¿Entonces por qué tanto interés en armar cuantas bancadas puedan? Para disfrutar de las prerrogativas que ofrece una bancada:
—Cinco millones 770 mil pesos al mes para el grupo parlamentario, administrados a discreción por el coordinador.
—90 mil pesos para pagar honorarios a asesores.
—10 mil pesos adicionales para pago de gastos de consultoría, estudios jurídicos, gastos de comunicación interna y materiales y suministros. —Derecho a oficinas, asesores, automóviles.
—Derecho a una presidencia de comisión, por lo que recibe recursos económicos, humanos y materiales aparte de la bancada.
Además, cada diputado gana 77 mil 888 pesos mensuales, más 45 mil 786 para “asistencia legislativa” y 28 mil 772 para “gestión y atención ciudadana”; y cada senador 126 mil 800 pesos mensuales.
De manera que todo esto lo tendrá la izquierda, pero multiplicado por cuatro, con posibilidad de todavía hacerse de una bancada más en el Senado, si Movimiento Ciudadano logra convencer a Alejandro Encinas, y tres más, de dejar su curul en el PRD.
Movimiento Ciudadano sólo tiene una senadora, Layda Sansores, aunque Luis Walton, líder del partido, confía en que “nos queda tiempo para ver si cuatro senadores perredistas se van con nosotros”.
De ahí que la izquierda celebrara ayer la calificación final del IFE sobre la elección de legisladores el pasado 1 de julio, cuando votaron para el Congreso los mismos 49 millones de ciudadanos que lo hicieron para la Presidencia… votación ésta que, sin embargo, quiere invalidar.
Pero al final aceptará la decisión del Tribunal Electoral sobre la elección presidencial, aunque les desfavorezca.
Porque, por nada del mundo, perderán esos cinco millones 770 mil pesos de cada bancada, esos 77 mil 888 pesos mensuales por diputado, esos 126 mil 800 por senador…
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