...que no significa triunfo para todos los mexicanos.
Al igual que las modificaciones a la Ley del Issste, que han ocasionado mucha polémica por perjudicar a un pequeño sector con relación al número de empleados que no pertenecen a los beneficios de ese régimen y desempleados que no gozan de ningún tipo de seguridad social, la lucha por las plazas en las que los maestros pueden "heredar" a sus hijos ha causado mucha inconformidad en ese gremio de mexicanos privilegiados.
Interesantes revelaciones hace Emilio Jiménez Ancona, líder del SNTE sección 25 sobre la herencia laboral a la que tienen derecho los hijos de los maestros y que representa un triunfo entre los empleados del magisterio es un burla para miles de padres de familia desesperados por carecer de un empleo bien remunerado o cuando menos que sea considerado como empleo estable.
Los agremiados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y otros similares son afortunados y privilegiados, son la parte marginal que durante el siglo pasado fueron beneficiados a cambio de mantener al país "estable y en paz" con tal de asegurar con sus votos un partido político en el poder (PRI).
Pero las épocas cuando era una preocupación la abundancia, cuando era un problema administrar tanta riqueza, el cinturón de la burocracia engrosó y con el paso del tiempo nos ha llevado a un probable colapso económico de nefastas consecuencias.
¡Cómo es posible que los maestros luchen por garantizar el empleo de sus hijos!
Cuando por cada uno de ellos existen 50 padres de familia que tienen que mal nutrir a su familia y reducir su calidad de vida, para que sus hijos puedan asistir a clases y fincar esperanzas que la "educación" les brindará un mejor nivel de vida.
Esta realidad es una caricatura grotezca que margina a la sociedad y no queda de otra nada más que reír en vez de llorar.
Al igual que las modificaciones a la Ley del Issste, que han ocasionado mucha polémica por perjudicar a un pequeño sector con relación al número de empleados que no pertenecen a los beneficios de ese régimen y desempleados que no gozan de ningún tipo de seguridad social, la lucha por las plazas en las que los maestros pueden "heredar" a sus hijos ha causado mucha inconformidad en ese gremio de mexicanos privilegiados.
Interesantes revelaciones hace Emilio Jiménez Ancona, líder del SNTE sección 25 sobre la herencia laboral a la que tienen derecho los hijos de los maestros y que representa un triunfo entre los empleados del magisterio es un burla para miles de padres de familia desesperados por carecer de un empleo bien remunerado o cuando menos que sea considerado como empleo estable.
Los agremiados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y otros similares son afortunados y privilegiados, son la parte marginal que durante el siglo pasado fueron beneficiados a cambio de mantener al país "estable y en paz" con tal de asegurar con sus votos un partido político en el poder (PRI).
Pero las épocas cuando era una preocupación la abundancia, cuando era un problema administrar tanta riqueza, el cinturón de la burocracia engrosó y con el paso del tiempo nos ha llevado a un probable colapso económico de nefastas consecuencias.
¡Cómo es posible que los maestros luchen por garantizar el empleo de sus hijos!
Cuando por cada uno de ellos existen 50 padres de familia que tienen que mal nutrir a su familia y reducir su calidad de vida, para que sus hijos puedan asistir a clases y fincar esperanzas que la "educación" les brindará un mejor nivel de vida.
Esta realidad es una caricatura grotezca que margina a la sociedad y no queda de otra nada más que reír en vez de llorar.
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